Equipo investigador
Junto a la doctora Norka Fuentes, encargada de los estudios ambientales y limnológicos, participó el investigador asociado Francisco Araos, quién trabajó directamente con las comunidades; y los investigadores asociados al laboratorio de Limnología, Aldo Arriagada (biólogo marino, candidato a doctor en ecología evolutiva), quien estudió la biodiversidad de flora y fauna y Catalina Ríos (bióloga marina) quien estudio las microalgas de la laguna.
“El lugar presenta hasta hoy una buena condición ambiental, con bosques de pantano o Hualves, ecosistemas únicos, hay muy pocos lugares con estas características en el mundo y nos damos cuenta que al no estar protegidos, se están haciendo caminos, hay extracción de leña, y monocultivos forestales que se ubican entorno a la laguna, es importante para las comunidades que viven en este lugar que estos territorios sean protegidos. Par esto se propone actividades de turismo de conservación y que los dueños de las forestales respeten un mínimo de 30 metros de bosque de ribera entorno a la laguna y rio Pucopio, para que estos bosques retengan los contaminantes y sedimentos que pudieran llegar a la laguna y que además sirvan de corredores biológicos a los vertebrados que se observaron en el lugar”, precisó la doctora Norka Fuentes.
A su vez, Catalina Ríos, explicó la importancia del levantamiento de información desde los ecosistemas acuáticos “ya que así se establece una línea base, es decir, estos datos son comparables para futuras investigaciones o nuevos estudios que se quieran realizar, afortunadamente laguna Trinidad tiene una buena condición ambiental ahora, las microalgas nos indicaron que es una laguna altamente diversa comparada con otros ecosistemas, como el lago Rupanco por ejemplo, pero no sabemos qué pueda ocurrir en el futuro, ya sea por el cambio climático o por las perturbaciones antrópicas o naturales que puedan ocurrir. Además, con este estudio diagnóstico, como bien dice la palabra es un diagnóstico, da pie para seguir investigando y establecer figuras de conservación en el futuro para que las siguientes generaciones tengan la posibilidad de conocer estos valiosos ecosistemas”, destacó.
Resultados
Norka Fuentes, limnóloga, doctora en recursos naturales, explicó que la subcuenca de Laguna tiene una superficie de 11.390 has y una red hídrica que alcanza una longitud de 19,36 km. “Los resultados del modelo simple de sedimentación permiten establecer como hipótesis preliminar que la red hídrica de Laguna Trinidad presenta diferentes grados de erosión, arrastre y sedimentación de materia orgánica, afectando de manera más directa, los sectores bajos de la subcuenca donde la pendiente tiende a ser menor. En general los sectores de la subcuenca cuyos pronósticos sugieren un mayor arrastre de materia orgánica, muestran un alto grado de sobreposición espacial y cercanía con el cultivo forestal”, puntualizó.
Monocultivos
Según la investigadora, el ecosistema hídrico “Laguna Trinidad” “según, indicadores fisicoquímicos y biológicos y de indicadores de estado, sus aguas poseen una extraordinaria pureza y escasez, por lo que forman parte única del patrimonio ambiental del país. No obstante, las concentraciones de fósforo total y de saturación de oxígeno indicaron una condición ambiental de mesotrofía, es decir situación de alerta que indica que la buena condición ambiental se está deteriorando en zonas de mayor sedimentación de materia orgánica, donde es posible apreciar el predominio de los monocultivos forestales, los cuales llegan hasta la laguna misma, con una reducida y casi nula presencia de bosque nativo de ribera”, precisó.
Sociocultural
Francisco Araos, antropólogo, doctor en Ambiente y Sociedad, fue investigador asociado en el proyecto en que realizó un diagnóstico sociocultural de la comunidad indígena Rayen ko -Lafquén, y de las diversas formas y modos de vida asociados a Laguna Trinidad al bosque de Pantano del Estero Pucopio; “Este estudio permitió reconocer la relevancia de ambos sistemas socioecológicos en la historia de ocupación del territorio, los modos de vida y el bienestar de las comunidades indígenas. La laguna Trinidad fue un sitio de circulación intensiva de personas y bienes, que conectaba la realidad local con el río Bueno por el norte, y con la cordillera de la costa por el sur. Además, es un sitio que presenta narrativas orales propias de la tradición mapuche-huilliche. Las principales amenazas ambientales se asocian a los impactos de la explotación forestal a gran escala en el entorno de la laguna y a la producción de leña desde el bosque de pantano del estero Pucopio. La protección de este territorio requiere de un trabajo colaborativo entre los diversos actores identificados, basado en acuerdos que reconozcan la contribución de los pueblos indígenas a la mantención de la biodiversidad, su autonomía en la toma de decisiones y la distribución equitativa”, sostuvo.